El plan de reforma laboral propuesto por el ministro Federico Sturzenegger incluye la reintroducción de los tickets de comida como beneficios no remunerativos.
Estos tickets eran comunes en los años 90 y se usaban para que los empleados pudieran comprar alimentos.
El nuevo plan busca volver a implementar estos tickets de comida de la siguiente manera: no formarán parte del salario y no se contarán para calcular indemnizaciones u otros beneficios.