¿UN SALTO AL PROGRESO O UN RIESGO PARA LA DEMOCRACIA?
El presidente, Javier Milei, desató una verdadera tormenta con su intención de transformar el Estado. Su decreto de necesidad y urgencia, con 366 medidas, desencadenó cacerolazos, manifestaciones y demandas judiciales. El proyecto de "Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos" que propone, con 351 páginas y 664 artículos, aborda aspectos electorales, penales, impositivos y políticos desafiando límites constitucionales. Mientras el DNU ya está en vigencia, el proyecto de ley ómnibus debe pasar por ambas cámaras del Congreso para ser efectivo.
Milei busca ampliar su poder presidencial hasta 2025 con la "Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos", generando un debate acerca de la concentración de poder en la figura presidencial. Pide declarar “la emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, previsional, de seguridad, defensa, tarifaria, energética, sanitaria, administrativa y social hasta el 31 de diciembre de 2025”.
Plantea desregular una gran variedad de sectores económicos, como el laboral, el comercial, el inmobiliario, el aeronáutico, el de la salud y hasta el de los clubes de fútbol, el paquete de leyes se centra en áreas que, según la Constitución, solo pueden ser modificadas por el Congreso.
Propone cambios significativos en el sistema electoral, eliminando las PASO, modificando la financiación de campañas y alterando otros aspectos claves. Plantea la privatización de empresas estatales que a lo largo de años tienen superávit. ¿Por qué privatizar empresas que le dan ganancias al Estado?
Introduce ajustes en impuestos y jubilaciones, que también están en juego, ya que los aumentos propuestos serían determinados por el ejecutivo, quitando la movilidad y generando preocupaciones sobre la pérdida de derechos adquiridos. Según el artículo 106 de la ley enviada por Milei, "hasta tanto se establezca una fórmula automática, el Poder Ejecutivo Nacional podrá realizar aumentos periódicos atendiendo prioritariamente a los beneficiarios de más bajos ingresos". Es decir, los aumentos serán por decreto mientras no haya fórmula automática.
También, la ley ómnibus modifica la estructura de la Comisión Nacional de Biblioteca Populares, destruye el Fondo Nacional de las Artes, favorece a las grandes cadenas de librerías en detrimento de las pequeñas librerías, que no pueden competir con esos comercios gigantescos, y además propone desfinanciar el INCAA.
El proyecto genera una incertidumbre evidente: ¿no desafía acaso las normas constitucionales? Algunos señalan esta movida como una potencial provocación que podría agitar el panorama político.
Hay que tener en cuenta que, nunca en la historia de la democracia llegó al poder un presidente sin experiencia de gestión, sin experiencia política, sin diputados, ni senadores, ni gobernadores. Sin movimientos sociales, ni sindicatos que lo respalden, ni tampoco el respaldo de grandes grupos económicos.
Por otro lado, el DNU de Milei:
Deroga varias leyes relacionadas con alquileres, abastecimiento, góndolas, compras nacionales y más. Transforma empresas estatales en sociedades anónimas para su posterior privatización. Modifica regulaciones laborales, aduaneras, del sistema de salud y de diversos sectores.
Tanto el DNU como la Ley Ómnibus desafían las normas constitucionales y políticas establecidas, lo que ha llevado a diversas acciones.
RICARDO QUINTELA PRESENTA ACCIÓN ANTE LA CORTE SUPREMA PARA DECLARAR INCONSTITUCIONAL EL DNU
La reacción no se hizo esperar y llevó al gobernador de La Rioja, respaldado por Zaffaroni, a presentar una acción ante la Corte Suprema, argumentando la inconstitucionalidad de estas medidas. Quintela enfatizó que el DNU atenta contra el federalismo y la institucionalidad republicana, y vulnera derechos laborales, sociales, económicos y culturales de la sociedad argentina. La Corte Suprema de Justicia recibió la demanda, pero pospuso su pronunciamiento hasta después de la feria judicial de enero.
El panorama planteado es desafiante y polarizador. ¿Realmente vinieron a salvar la República? Las respuestas siguen siendo inciertas
¿UN CHOQUE INEVITABLE?
La situación se torna más tensa con el enfrentamiento entre Milei y los trabajadores. Además del torbellino legislativo desencadenado, hay un ambiente de tensión que dinamitó las conversaciones entre el sindicalismo y la Casa Rosada. El impacto en los derechos laborales es un punto decisivo y divisorio.
Las modificaciones propuestas no solo reestructuran el gobierno, sino que también impactan directamente en los derechos laborales.
La Confederación General del Trabajo (CGT), desde sus sectores más moderados hasta los más confrontativos liderados por Pablo Moyano, decidieron tomar una postura concluyente. Anunciado un paro nacional para el 24 de enero y la determinación es clara: no tienen intenciones de desistir a menos que el Gobierno dé marcha atrás el DNU y la Ley Ómnibus.
Esta movilización contará con el respaldo de la CTA liderada por Hugo Godoy y la CTA de Hugo Yasky, junto con la Unión de Trabajadores de la Economía Popular. También organizaciones del Movimiento Evita de Emilio Pérsico, para resistir estas medidas, donde sienten un ataque directo a las conquistas históricas de los trabajadores.
El rechazo al DNU de Milei también se manifiesta en diferentes regiones, como en La Rioja, donde se denuncia el impacto negativo en la industria y se alerta sobre el intento de arrogación de poder del presidente, afectando la vida de los ciudadanos.
LA CGT EN LA RIOJA
Manifestó un enérgico repudio al DNU de Milei, considerando que atenta contra los derechos laborales y representa un avasallamiento al Congreso y al pueblo argentino. Declararon un estado de alerta, movilización y asamblea permanente. Su comunicado destaca la eliminación de la promoción industrial y el impacto negativo en el parque industrial, además de otros puntos críticos del DNU.
En respuesta a esta crisis, hubo una reunión entre la CGT y legisladores nacionales. En este encuentro, se solicitó a los representantes legislativos rechazar tanto el proyecto de Ley Ómnibus como el DNU de Milei, se expuso que representan un perjuicio para la clase trabajadora.
Se está vislumbrando un modelo anarcocapitalista, y queda en duda si esta era la prometida salvación de la República que se anticipaba. “Cuando un Estado desregula, regula a favor de los poderosos”, es lo más coherente que escuché…
¿Venían a salvar la República?
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