¿Y LAS PROPUESTAS DONDE ESTÁN?
¿Cómo harán las y los candidatos para dirigirse a un electorado que, mayoritariamente, no tiene interés en la política, no tiene identificación partidaria y ya no cree en los besos con ciudadanos en las fotos? Las campañas negativas y la personalización de la política ¿Serán las principales estrategias a las que recurrirán las fuerzas políticas en Chilecito, de cara a las elecciones del 7 de mayo?
Pareciera que los candidatos están enfocándose en la descalificación del adversario y en la creación de emociones (amor, odio), sin ofrecer soluciones concretas a los problemas que enfrenta la población. Esto hace que el electorado discuta más sobre personas que sobre propuestas para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía. Las proposiciones que hacen los y las candidatas, pueden tener algunas interacciones en los medios, pero cuentan con un gran problema: simplifican la discusión y hacen que, las y los votantes, debatan sobre las personas antes que sobre las ideas.
¿Cómo solucionarán
el crecimiento de la inseguridad en Chilecito?, ¿qué harán con la terminal?, ¿cómo
se resolverá el problema en el sector de la salud pública?, ¿quién terminará de
asfaltar e iluminar todo el departamento? ¿qué pasó con el hospital nuevo único en la
región?, ¿se construirán más viviendas?, ¿las demandas de educación se verán
reflejadas en las agendas de los candidatos?
La desidia es un parámetro
interesante a la hora de planificar la propuesta de gestión que tengan las y
los candidatos. Como chileciteños debemos ser honestos a la hora de pasear por
nuestro departamento y ver qué es lo que está faltando, desde calles limpias y
transitables hasta barrios iluminados. ¿Hay esperanzas para la juventud, o
también seguiremos viéndolos partir hacia otros destinos?, ¿qué harán en el
presente de las personas mayores que hoy sufren la burocracia y el abandono?,
¿cómo se fomentará que la mano de obra local no emigre? ¿y que las inversiones
de nuestros ciudadanos no terminen siendo carteles de “liquidación por cierre”?
La hora de las
propuestas está llegando, cabe preguntarse si llegarán con planes de gestión
aplicables y realizables. Ya sabemos lo que necesita Chilecito, y las y los
candidatos también, solo nos queda escuchar cómo harán para solucionar los
problemas que tenemos en la Perla del Oeste.
La personalización
de la política y la campaña negativa no son suficientes para convencer de votar
por un candidato u otro.
La campaña
electoral llegó en un momento donde el escenario económico es complejo, porque
la realidad viene castigando duro, perdigones de la pandemia que aún están complejizando
el desarrollo.
Hay que convencer a
los desengañados de darle una oportunidad para que Chilecito avance en obras,
políticas públicas reales, con un turismo concreto, sustentable y vuelva a ser
esa ciudad pujante, donde casi alguna vez logramos poner en discusión de traer
la capital provincial al oeste de La Rioja.
ELEUTERIA
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