EL GRITO QUE GENERÓ UN JUZGADO
Desde hace 6 años, el 3 de junio es el día de "Ni una menos" y recordamos que la violencia machista que desencadena los femicidios, no es sólo ese suceso, sino que responde a un sistema de opresión cotidiano. Ante aquel hito fue imposible mirar para otro lado, y en Chilecito puso en evidencia la necesidad de la creación de un nuevo Juzgado y de una reforma judicial que incorpore perspectiva de género y sume una mirada diversa.
La cotidianeidad de los hechos de
violencia hacia la mujer, en La Perla del Oeste, se naturalizó durante años, se
silenció, se ocultó, se la disfrazó, era normal maltratar. Sin duda
que la lucha de muchas y muchos valientes generó la necesidad de un Estado
presente, con políticas públicas integrales a corto, mediano y largo plazo para
este abordaje.
Naturalizar la violencia, así como
minusvalorar sus dimensiones e impactos, son factores que generan una cultura
de impunidad no sólo legal e institucional, sino también social.
En este sentido, la creación del nuevo
Juzgado en Chilecito fue una clara definición política de dotar de mayor
institucionalidad a las políticas contra las violencias de género. Y no fue
casual que el inicio del proyecto, estuvo en la cabeza de un Chileciteño.
El diputado, Ricardo Herrera,
presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Legislatura de la
Provincia y autor del proyecto de Ley N° 10.329
(https://www.argentina.gob.ar/normativa/provincial/ley-10329-123456789-0abc-defg-923-0100fvorpyel/actualizacion),
supo que se concede al interior de herramientas necesarias para resolver estos
conflictos. Siempre estuvo el compromiso de una lucha contra la violencia de
género, pero con esta decisión política, se resolverá un inconveniente
estructural que hay en la Función Judicial.
Y remarco que no es casual, porque
hace tiempo que se vienen implementando decisiones fuertes en cuanto a esta
problemática. Que haya más denuncias no significa que necesariamente hayan
aumentado los casos, sino que, lo que aumentó es que más mujeres se animaron y
se animan a denunciar. Y esto es claramente debido al fuerte respaldo político
que se viene dando con este tema.
Tampoco fue casual que la puesta en
funcionamiento de la nueva Jueza Chileciteña en su cargo, fue en una fecha tan
significativa como el 3 de junio. El grito “Ni Una Menos”, es un bramido
repleto de sentimientos que reclama políticas públicas y compromiso social para
frenar la violencia feminicida, y a su sexto aniversario llegó con avances y
muchos asuntos pendientes.
Un grito que ha demostrado que
desentenderse del problema, descreer de la palabra de las víctimas, minimizar
sus denuncias, desatender sus pedidos de ayuda y protección en este momento
donde la sociedad evoluciona a pasos agigantados, es un antes y un después, de
aquellos que quieren mirar para otro lado.
“Ni Una Menos”, un grito que nos
convierte en Eleuteria (denominación que se le daba a un esclavo cuando obtenía
su libertad). Un movimiento y un grito que hizo temblar al país, y que en
Chilecito, logró la creación de un nuevo juzgado.
ELEUTERIA
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