9 DOMINGOS
Hoy no es un domingo más, es el noveno domingo del regreso a la democracia donde argentinos y argentinas van a disfrutar de una verdadera fiesta cívica, porque el pueblo elige a sus representantes.
Qué paradoja octubre, justo este martes 30 se celebra en todo el ámbito nacional el “Día de la Democracia”, fecha instituida para conmemorase como jornada oficial en recuerdo de la recuperación de la misma que consiguió el país ese día del año 1983, hace exactamente 36 años atrás.
Vuelven
a ser las urnas el medio canalizador de la voluntad popular, y el vehículo para
elegir a nuestros gobernantes. Votar es representar ese acto de democracia.
Y hoy votar
no es cualquier cosa, no es solo cumplir con una norma establecida. Votar es usar tu voluntad,
es ejercer tu derecho, tu decisión, y lo que vos querés.
Cuando
llega el día de las elecciones, la gente mayor que vivió en carne propia el
golpe de las dictaduras y la supresión de sus derechos, se viste con lo mejor
que tiene, porque sabe que tiene que asistir a una fiesta de gala, de lujo, como
lo es la fiesta de la democracia.
Saben
que tienen que seguir apostando a la democracia, aunque aparezca imperfecta,
porque
le temen a ese momento, ese momento oscuro donde no pudieron elegir nada.
Y es
que tener la posibilidad de elegir tu voto, es tener una herramienta poderosa
en tus manos, donde nada más y nada menos será esa herramienta, la que decidirá
quién te representara y quien dispondrá todas las cuestiones y decisiones políticas
para el bienestar de todo el pueblo argentino.
Pero
también hay que ser serios y reflexionar que conlleva una gran responsabilidad
y requiere de estar informados al respecto.
Hoy
la gente saldrá a votar no tan solo por un partido o por un candidato, estará
votando por la democracia. Y el candidato que no tenga la intuición, la
sensibilidad, la empatía y la calle para saber lo que piensa la gente, mejor
que se dedique a otra cosa.
La elección nacional de hoy, constituirá el noveno comicio presidencial ininterrumpido de la historia argentina tras la dictadura cívico militar, donde la democracia cobra un rol principal como promesa de futuro reparador y como automática ruptura con el pasado inmoral y de violencia.
ELEUTERIA
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