MUCHAS MANOS EN UN PLATO HACEN MUCHO GARABATO
“Muchas manos en un plato hacen mucho garabato”. A menos de seis semanas de las elecciones muchos electores, por la cantidad de candidatos se sienten desconcertados a la hora de votar.
Hace varios días
se viene hablando de "Listas Colectoras", estrella de este 27 de octubre. Y pareciera que el panorama no
parece claro para nadie. Pero en realidad sirve para que un candidato pueda
incorporar otras boletas a la propia y le aporten más votantes.
¿Pero porque
acuden a este sistema? Quizás sea que el problema radica en que los grandes partidos
están siendo reemplazados por pequeños
partidos sectoriales, y que los principales candidatos no estén fortalecidos
del todo con la aceptación popular, entonces tengan que recurrir a esta
estrategia.
Para el
estamento presidente, hay dos fórmulas que sobresalen y dos modelos de
gobiernos bien diferenciados. Lo mismo ocurre para el estamento de diputado nacional.
Para la gobernación, la cosa ya se divide en tres: dentro de lo que es el
peronismo, sale dividido en dos sectores contra el sector de cambiemos. Y la
gran estrella de esta elección, son las colectoras en el estamento a concejales y
diputado Provincial.
Hay quienes se
atreven a afirmar que fragmentan los partidos políticos. Que
la democracia, no concibe su vigencia sino por la acción de los partidos
políticos, que son sus pilares.
Y los más
arriesgados y los que están en desacuerdo, explican que no puede haber
democracia auténtica donde los partidos políticos han perdido su identidad
integrándose en conglomerados amorfos, exentos de ideas, de principios comunes
y de valores morales compartidos. Porque el resultado de esa estrategia se
traduce en la desorientación y el escepticismo de los votantes frente a boletas
electorales múltiples. Y por otro lado se intenta demostrar que cuanto más hay
variedad de elección, mejor se podrá elegir el representante.
Lo cierto también
es que, aunque la mayoría de los candidatos colectoras, que no tienen los
primero lugares saben que no entraran, estar en la carrera electoral les
permite hacerse conocer y preparar el terreno para futuras elecciones sumando
fuerzas. Tal vez no existan afinidades ideológicas, pero aportan votos al mínimo
precio de alguna partecita al poder.
Además también
intentan obtener gran cantidad de votos para después poder sentarse en la mesa
de negociación posterior a las elecciones y negociar algún espacio dentro del
próximo esquema de Gobierno.
Lo que queda
claro de todo esto es que las fuerzas políticas se debilitan, porque es más fácil
competir por fuera del partido en una colectora que someterse a una interna o
negociar los lugares.
Las reglas
electorales democráticas cambian vertiginosamente, pero deben fomentar la
presencia de opciones claras para los ciudadanos para fortalecer el vínculo
representativo.
ELEUTERIA
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